Cada día con más intensidad se oye hablar de emprendedores y emprendedoras, de la cultura de la innovación, de la necesidad de descubrir y reinventar negocios para así poder avanzar hacia nuevos modelos de empresa o modelos sociales. Es un hecho ya establecido que necesitamos tener cultura emprendedora para afrontar los retos que la sociedad en la que vivimos tiene por delante.
¿Qué es la cultura emprendedora? Las bases del emprendimiento
Una persona emprendedora es aquella que identifica una oportunidad de negocio o de mejora social, generalmente innovadora y disruptiva, y decide hacerla realidad asumiendo todas las tareas necesarias para ello y por extensión el éxito o el fracaso de esta acción.
Indicamos deliberadamente “mejora social” porque el emprendimiento no está reñido con las entidades sin ánimo de lucro. De hecho, esta área es una de las que tiene una gran demanda de innovación y de soluciones avanzadas y modernas como veremos más adelante.
Volviendo a la definición de cultura emprendedora, diremos que es la que permite la disrupción en la sociedad. Replantea modelos de negocio existentes y descubre nuevas oportunidades. En conjunto, desplaza modelos de negocio en su ciclo final o con apenas recorrido adicional y los sustituye por una nueva forma de hacer, más adaptada a las necesidades de la sociedad y de los medios de que esta dispone.
¿Por qué necesitamos personas emprendedoras?
En el último párrafo, hemos hecho una mención a las teorías de Joseph Alois Schumpeter que, estudiando los ciclos económicos, ya llegó a la conclusión a principios de 1900 de la imperiosa necesidad de contar con lo que él llamó “destrucción creativa”. Esta es, según este prestigioso economista, necesaria para poder mantener a la sociedad sana y en constante evolución.
Hoy, probablemente, no recuerdes ya el impacto que tuvo en la empresa discográfica la aparición de iTunes y, a posteriori, Spotify y el resto de servicios de streaming musical. Si haces una retrospectiva hasta el momento previo a su aparición, el mercado discográfico era tal que hoy en día no solo no lo reconocerías, sino que no lo entenderías. Tras un breve periodo de adaptación, no solo se ha probado que la innovación era ventajosa para el cliente final, sino también para la industria que supo “leer” el cambio de modelo, adaptarse y crecer nuevamente.
La necesidad de reinventar modelos de negocio y descubrir nuevas maneras de hacerlos está asumida casi mundialmente. Tanto es así, que en España y también en Europa, las instituciones contemplan ayudas y soporte al emprendimiento para sus habitantes. El beneficio que obtienen un país o un conjunto de países de una cultura emprendedora correctamente estructurada es diferencial.
¿Qué requiere ser una persona emprendedora?
Hemos visto que el emprendedor/a asume una serie de riesgos fruto de su visión de una idea innovadora, un nuevo producto o servicio. Para poder tener éxito en la materialización de su idea son necesarios una serie de elementos mínimos. A saber:
- Plan de negocios.
- Identificación de recursos necesarios (económicos, materiales y humanos).
- Liderazgo y capacidad de decisión.
- Responsabilidad
Estos elementos definirán las posibilidades del éxito de su emprendimiento. Es muy útil dentro de un programa integral de apoyo a la cultura emprendedora que observes los recursos y el acompañamiento necesario para no olvidar estos puntos clave.
¿Qué campos se nutren de la comunidad emprendedora?
La cultura emprendedora no conoce fronteras y prácticamente cualquier área empresarial o social es candidata a cambios profundos que redefinen su status quo. No obstante, hoy por hoy existen dos áreas donde la innovación es requerida con mayor fuerza.
Emprendimiento TIC
Esta es el área que probablemente imagines cuando hablamos de start-ups, innovación, disrupción, etc…
El motivo es que uno de los principales aceleradores de la innovación es la tecnología. Hoy en día estamos viendo que la velocidad a la que la tecnología despliega, no solo nuevos recursos técnicos, sino diferentes modelos de interacción con las personas, favorece y acelera la visión de nuevas formas de entender nuestro día a día.
Los cambios de hábitos, de consumo y de relación social que actualmente ampara la evolución tecnológica son un campo de cultivo muy fértil para poder desarrollar nuevos conceptos. Tanto es así que se ha convertido en uno de los focos de inversión
de instituciones gubernamentales y centros educativos más relevantes.
Emprendimiento social
En un post anterior de nuestro blog, ya te hablamos de las características del emprendedor y emprendedora social.
Afortunadamente, la sociedad en la que vivimos cada vez hace más hincapié en el tema social. La necesidad de conseguir niveles de bienestar dignos para la humanidad y también la urgencia de mantener nuestro planeta limpio y en buen estado de salud son ahora temas capitales.
En este sentido habrás visto ya diferentes asociaciones y agrupaciones que, con recursos limitados, pero haciendo gala de una creatividad inteligente consiguen resultados eficaces. Este tipo de cultura emprendedora requiere de un asesoramiento específico por la naturaleza de sus objetivos que debes conocer.
Proyectos Educativos
La línea de actuación más bonita de todo el servicio gratuito de asesoramiento y consolidación empresarial a la comunidad universitaria y emprendedora de Canarias, conocido como Emprende.ull.
El proyecto educativo Enseñar Para Emprender, más conocido como “EPE”, es un proyecto donde los más pequeños y pequeñas se convierten en auténticos protagonistas de la cultura emprendedora. Durante una serie de meses, el alumnado de primaria y secundaria de diversos centros de la Isla, se organizan en cooperativas y elaboran productos artesanales con materiales reciclados o cultivan hortalizas en los huertos de los colegios y, posteriormente, pone a la venta todas su creaciones en una feria abierta al público.
El objetivo es que se conviertan en empresarios y empresarias, de forma ficticia, y aprendan los distintos pasos a seguir para abrir un negocio. De este modo, se impulsa la cultura emprendedora entre la juventud tinerfeña, de manera lúdica, y se inculcan valores como el trabajo, el compañerismo, la solidaridad o la superación personal. Puedes consultar la VIII Edición aquí.
El proyecto educativo Idéalo está promovido por la Universidad de La Laguna desde su Fundación General, dirigido al profesorado y alumnado de educación secundaria, bachillerato y formación profesional. Con “Idéalo” se pretende estimular el sentido de la iniciativa y el espíritu emprendedor en el aula, a través del desarrollo de proyectos de empresa innovadores.
Asimismo, se plantea como propuesta de apoyo para el desarrollo de la asignatura “Iniciación a la Actividad Emprendedora y Empresarial” de Educación Secundaria. Este aprendizaje experiencial, se ha desarrollado mediante un itinerario formativo, dirigido al profesorado y alumnado, que integra 4 módulos online en los que se pretende empoderar en las siguientes cuestiones:
- Potenciar el espíritu emprendedor en el aula.
- Desarrollar y gestionar trabajos colaborativos.
- Fomentar la detección de ideas de empresa e iniciativas emprendedoras.
- Guiar en el proceso de elaboración de un proyecto emprendedor.
- Aplicar los procedimientos adecuados para comunicar los proyectos a través de herramientas digitales.
El objetivo de este proyecto es, por tanto, desarrollar la competencia “Sentido de la iniciativa y espíritu emprendedor” y competencias digitales en el aula a través del desarrollo de proyectos de empresa innovadores. En esta I Edición se han presentado todas estas iniciativas emprendedoras.
Siguientes pasos
No podemos ignorar la necesidad de amparar el emprendimiento y favorecerlo, estructurarlo e integrarlo como una alternativa de futuro muy importante para nuestra sociedad.
Tanto si estás planteandote emprender, como si tu necesidad es aportar visión emprendedora a diferentes colectivos, cualquier ayuda es bienvenida. En este contexto es útil identificar servicios de acompañamiento y asesoramiento profesionales de centros especializados y solventes.
Podemos empezar atendiendo a jornadas gratuitas para orientarnos y, si ya conocemos algo, pasar a las “píldoras” o cursos especializados que van a permitirnos integrar la cultura emprendedora en nuestra vida. No esperes más y solicita tu asesoramiento personalizado.