La carga psicológica de la partida es la gran olvidada de la migración

viernes 20 de diciembre de 2019 - 12:19 WET

Juntos En la misma dirección reúne un panel de expertos internacionales para tratar el fenómeno migratorio desde el punto de vista de la salud mental y la calidad de vida de las personas migrantes

La tendencia generalizada se limita al número en cuestión de migraciones. Incluso, cuando la información no es mediática gran parte de las investigaciones académicas basan su planteamiento en cifras, ya se hable desde la óptica económica o social.

Sin embargo, esto facilita que el fenómeno migratorio sea deshumanizado, tal y como han reconocido los especialistas que han participado en la jornada ‘El dolor de un sueño. Problemas de salud mental en las migraciones humanas’, celebrada en el marco de la Semana Tenerife vive Diversidad y llevada a cabo recientemente en el TEA, Tenerife Espacio de las Artes, con motivo del décimo aniversario de Juntos En la misma dirección.

Se trata de un encuentro, organizado por esta estrategia para la gestión de la diversidad cultural y promoción de la convivencia en Tenerife, puesta en marcha por el Cabildo Insular en colaboración con la Universidad de La Laguna a través de su Fundación y del Observatorio de la Inmigración de Tenerife OBITen, destinado a abordar una de las grandes cuestiones olvidadas en el fenómeno migratorio: la carga psicológica que implica la partida.

Para ello se ha contado con la participación de la Universidad de La Laguna, Global Forum on Migration and Developmentb y Rielo Institute for Integral Development, quienes, a través de una exposición pormenorizada de los efectos de la migración en la salud mental, han coincidido en que, a pesar de los múltiples prismas desde los que se han enfocado estos desplazamientos, suele ser omitida la perspectiva comunitaria que incide en ellos.

En referencia al dolor que implica el sueño migratorio que se emprende para buscar unas mejores condiciones de vida, Enmanuele Caroppo, del Global Forum on Migration and Development, indicó que “las personas inmigrantes forzadas no han tenido tiempo de soñar su proceso, por lo que los factores de vulnerabilidad aumentan”.

Para Riccardo Colasanti, perteneciente al Rielo Institute for Integral Development, “el pensamiento xenófobo no es solo de la cultura actual, es algo diacrónico” porque, según manifestó, “hay un elemento antropológico interno del miedo al diferente”. Analissa Sacca concretó la situación de las personas inmigrantes en situación administrativa irregular, quienes tienen una discriminación y carga emocional extra “ya que están vivos pero no existen de cara a las administraciones”.

En un diálogo mantenido por estas instituciones expertas y en el que también ha participado José G. Soliño, ex rector de la institución académica lagunera vinculado al Instituto de Enfermedades Tropicales y al Campus África, y el grupo de trabajo de Tenerife Antirrumores de Juntos En la misma dirección, se planteó la necesidad de crear una red de trabajo internacional para potenciar la vinculación de la salud al fenómeno migratorio. Para ello, tal y como ha quedado patente en esta jornada, es fundamental emprender una línea de trabajo que incluya la dimensión comunitaria.

“Cuando la acogida es buena hay más posibilidades de que el estado de salud de las personas que migran sea favorable y de que esto se traduzcan en un mayor impacto positivo de la migración en la sociedad”, aseguró Caroppo. Una cuestión en la que coincidió la directora insular de Desarrollo Socioeconómico del Cabido de Tenerife, Ermitas Moreira, para quien “no se puede obviar la mejora al bienestar social que reporta la diversidad cultural a los territorios en los que se gestiona en favor de la convivencia”.

También, añadió que “el intercambio intercultural es algo intrínseco a la sociedad canaria, por tanto, su gestión no puede sino suponer una mejora en la calidad de vida de los vecinos y vecinas de Tenerife”.

Por su parte, la Rectora de la Universidad de La Laguna, Rosa María Aguilar, subrayó la importancia de “la fusión positiva de la investigación científica y la acción social para promover la convivencia en una isla en la que cada vez se observa una mayor diversidad humana y cultural. Sin embargo, no se puede obviar que los resultados académicos que se obtengan serán fundamentales para la definición de políticas públicas que permitan seguir avanzando en la consideración de la diversidad como uno de los principales patrimonios colectivos”.

¿Difundes?