La formación en las empresas: maneras de implementarla

jueves 03 de mayo de 2018 - 15:12 WEST

Una comunicación fluida y un sueldo óptimo contribuyen a aumentar la motivación de cualquier profesional. Sin embargo, estos no son los únicos factores que influyen en el rendimiento de una persona contratada. Aquí entra en juego el factor de la formación en las empresas. 

La formación en las empresas supone también una mejora en los resultados, tanto los de las personas en nómina como los de los directivos/as, susceptibles de participar.

A continuación, comprobaremos por qué resulta fundamental implementar este proceso dentro de un negocio. También te mostraremos las áreas de aprendizaje más solicitadas y los métodos utilizados.

Formación en las empresas: ¿por qué es importante?

La formación en las empresas resulta imprescindible debido a su capacidad para potenciar el conocimiento, gestión y también la actitud de la plantilla.

Estas virtudes conducen al crecimiento de la organización. Por tanto, la formación en las empresas funciona como una herramienta de cambio que no solo ayuda a las personas empleadas a desarrollarse individualmente. De hecho, las pone a prueba en diferentes contextos, incentivando su reflexión frente a situaciones que viven a diario en su puesto de trabajo.

Como estás suponiendo, los propósitos de esta técnica son aumentar el nivel de productividad, enriquecer los conocimientos del personal, mejorar sus competencias y lograr la polivalencia. Con la capacitación de sus plantillas, las empresas pretenden recoger buenas ideas, crear nuevos proyectos y potenciar las destrezas.

Este instrumento toma más relevancia que nunca pues la amplia competencia obliga a las corporaciones a actualizarse y a no dejar cabos sueltos. En la búsqueda de esta finalidad se consiguen los siguientes frutos:

Beneficios para la plantilla

– Se desvanece su intranquilidad por su permanencia en el puesto.

Aumenta su autoestima. Este nuevo estado contribuye a su integración en el engranaje.

– Prospera en su eficiencia.

– Adquiere otras habilidades, capacidades y pericias que le permiten tomar las decisiones correctas.

– La persona se vuelve más participativa.

– Se prepara para asumir otras responsabilidades e incluso para adoptar un rol de liderazgo.

Beneficios para la empresa

Por supuesto, la formación en las empresas también tiene beneficios para la propia entidad:

– La calidad de sus productos o servicios será mucho mayor.

– Se potenciará su competitividad en el mercado.

– Su rentabilidad crece.

– Consigue personas empleadas más comprometidas.

Áreas formativas más solicitadas por las plantillas

Las plantillas saben cuáles son los aspectos en los que se necesita un refuerzo y actualización constantes. Por eso, las áreas de formación en las empresas más demandadas son las siguientes:

Las nuevas tecnologías

La sociedad digitalizada en la que vivimos nos obliga a permanecer alerta. Continuamente irrumpen novedosas herramientas que te obligan a reciclarte.

Las personas empleadas demandan formación en las empresas para manejar correctamente los dispositivos con los que trabajan, pero también para profundizar en otros terrenos como el marketing o el diseño. Este tipo de enseñanza es la más impartida en la actualidad.

Los idiomas

Desenvolverse en una segunda lengua se ha colocado en los últimos tiempos en la lista de prioridades de cada profesional.

El inglés sigue siendo el idioma más demandado, aunque el chino vive un momento de auge. No olvidemos que este país establece relaciones comerciales con España con asiduidad. 

El liderazgo

Las personas que ambicionan puestos más relevantes en una empresa solicitan una formación en la empresa relacionada con el emprendimiento. Y es que suele tratarse de perfiles que no solo piensan en convertirse en directivos o directivas, sino en hacerlo en su propia compañía. Este tipo de capacitación es de las más solicitadas en nuestro país gracias a las cada vez más futuras personas emprendedoras; profesionales con creatividad y con ideas de negocio en mente, y en busca de asesoramiento para poner en marcha sus sueños.

Tipos de capacitación empresarial

Las corporaciones forman a su plantilla sobre estas materias que te acabamos de presentar mediante dos acciones formativas:

Dentro de la empresa

Aquí encontramos dos métodos. Por un lado, aleccionar a las plantillas en su mismo puesto. Nos referimos a esas personas que acaban de incorporarse o están a punto de hacerlo. Ellas comprobarán cómo avanzan, consiguiendo así los objetivos que enumerábamos con anterioridad. Por otro, rotar a la plantilla para que acceda a otras áreas y conozca cómo se opera en tareas diferentes a las suyas. Además, los directivos organizan discusiones colectivas para fomentar la cooperación y el trabajo en equipo. Todo esto conduce a un aumento de la productividad, uno de los objetivos primordiales de los cargos de responsabilidad.

Fuera de la empresa

Existen actividades de formación en las empresas obligatorias para el correcto funcionamiento de una organización.

Eso sí, en numerosas ocasiones la compañía en cuestión no dispone del personal cualificado para impartirlas. Es entonces cuando se recurre a ayuda externa. Estas enseñanzas suelen realizarse a través de Internet o en centros específicos de formación como escuelas de negocios o unidades de emprendimiento.

Los métodos más empleados en este caso son los siguientes:

Ponencias. Las experiencias de profesionales resultan vitales para entender un determinado terreno laboral. Por ejemplo, quienes busquen nuevas técnicas para negociar con eficacia encontrarán en David Prunell, fundador de Prunell Talent in Motion, al ponente indicado. Mientras, el narrador Diego G. Reinfeld podrá enseñarte nuevas técnicas de comunicación oral para que seas mejor portavoz de tu marca.

Talleres. Este tipo de formación en las empresas tiene una duración determinada y permite potenciar la creatividad de sus participantes, además de desarrollar habilidades ocultas. Es una de las técnicas de capacitación fuera de las empresas que contribuyen a crear conciencia de equipo.

Cursos. Nutren a las personas inscritas de conocimientos extra en todas las áreas imaginables. Otra de las ventajas de este sistema es que el entorno de aprendizaje puede ser online o presencial. Los cursos mejoran las competencias del personal en nuevas especializaciones y generan un espacio de reflexión. Es el procedimiento ideal para establecer enriquecedores debates.

Visitas. Suelen darse en empresas que innovan técnicamente. La plantilla acude a otra fábrica donde ya está implantado este método y conocen así su funcionamiento. Aprenden a través de la experiencia de sus semejantes, compartiendo impresiones y resolviendo dudas. Parece la táctica idónea para acelerar el aprendizaje de sus futuras funciones.

Como ves, la formación en las empresas no solo mejora las aptitudes del personal, sino sus actitudes.

Suponen el procedimiento perfecto para aumentar su motivación y sus competencias, logrando, de esta forma, una mayor productividad. En un momento en el que la competencia crece en numerosos sectores, esta metodología se antoja indispensable. Tu empresa crecerá si tu plantilla crece personal y profesionalmente.

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