Cataliza desde dentro: Carmen Martín, directora de Intelequia Software Solutions

miércoles 23 de diciembre de 2015 - 12:02 CET

Carmen Martín es la directora general y cofundadora de Intelequia Software Solutions, una empresa joven, cuyas primeras iniciativas comenzaron en el 2010 y sus profesionales fundaron a finales del 2011. Es una empresa innovadora centrada en servicios de consultoría tecnológica, sobre todo en soluciones tecnológicas de computación en la nube. Le preguntamos sobre su experiencia y percepciones como empresaria de acogida en el Programa Cataliza a través del cual terminó contratando a los dos becarios participantes.
 
– ¿Cómo conoció el programa Cataliza Canarias?
– Aproximadamente hace un año y medio y fue por varias fuentes, por gente de nuestro sector, compañeros de profesión de otras empresas y por profesionales que conozco de la Fundación General de la Universidad. Me hablaron de este programa, me pareció interesante, me metí en la página, investigué un poco, llamé, me informé y muy bien;  la verdad es que desde Intelequia estamos encantados con esta iniciativa.
 
– ¿Es su primera experiencia o la empresa ya ha participado en otras ocasiones?
– Esta es la primera experiencia que hemos tenido con el Programa Cataliza. Hemos contado en nuestro equipo con dos jóvenes titulados de formación profesional, que provenían de ciclos superiores relacionados con el desarrollo web y las aplicaciones móviles. Uno de ellos venía del CIFP César Manrique y el otro del IES Domingo Pérez Minik.
 
– Al terminar el periodo de prácticas profesionales no laborales, ¿ha contratado a alguno de estos dos jóvenes profesionales?
– Efectivamente, en los dos casos, estos jóvenes terminaron la primera fase del período de prácticas, pero nosotros no esperamos a la segunda fase sino que inmediatamente los contratamos.
 
– Entonces, ¿están satisfechos con el trabajo realizado por estas dos personas seleccionadas?
– Si, la verdad es que no solamente porque vinieron muy preparados, sino también por la actitud con la que llegaron. Tienen esa actitud de querer aprender y de querer quedarse trabajando con nosotros y eso parece que no, pero lo valoramos mucho. La titulación es fundamental, no hay que quitarle valor, pero la actitud de la persona es muy importante.
 
– ¿Ha sido sencillo para ustedes el proceso para participar en Cataliza?
– Sí, una vez lo conocimos, la verdad es que es nos resultó muy sencillo porque bien a través de la web o telefónicamente, siempre había una persona pendiente, que me explicaba, me asesoraba, me avisaba de los plazos, me orientaba en todo el proceso, en definitiva, se preocupaba mucho porque esta iniciativa saliera adelante.
Para las empresas, todo lo relacionado con la contratación es un proceso normal y corriente, que requiere estar muy pendiente y que lo hacemos a diario; pero en este caso, cuando se trata de personas en prácticas, te lo ponen más fácil. Por eso te planteas a cuántos titulados puedes acoger en este período en el que realizarán las prácticas. Nos han asesorado y liberado de mucho papeleo y cuando te vienes a dar cuenta, realmente la persona ya se ha hecho con el trabajo, se ha formado, ha ganado valor en la empresa y lo que te planteas es dejarla trabajando y contratarla.
 
– ¿Y la información que recibió fue suficientemente clara?
– Sí, y si en algún momento yo he tenido alguna duda, ha sido tan fácil como descolgar el teléfono o enviar un correo electrónico y sobre la marcha me contestaban, es decir, la verdad es que solo tengo cosas buenas que decir de la atención y el seguimiento que se hace. Yo recomendaría a otras empresas que participen de este Programa, porque tengo una valoración muy positiva.
 
¿Cree que han encontrado a los candidatos idóneos para el puesto?
– La verdad es que en los dos casos nos ha sorprendido positivamente. Sabíamos que esta era la primera experiencia en el sector de estos jóvenes estudiantes, que no venían con un histórico laboral. Estábamos buscando a alguien formado y estábamos esperando a ver qué nos íbamos a encontrar; lo que sí nos planteábamos era conocer cuáles eran sus puntos fuertes para intentar sacar lo mejor de ellos. En este caso fue así, nos interesaba alguien de la rama del desarrollo web y del desarrollo de aplicaciones de dispositivos móviles, porque tenemos un área de la empresa que se dedica a ello, pero una vez dentro nos dimos cuenta de que tenían muchísimas más facultades y aptitudes para muchísimas tareas del desarrollo normal del día a día en la empresa, como por ejemplo para el marketing online.
En definitiva, pensábamos que estos estudiantes recién titulados, tenían unas capacidades, pero la verdad es que las han sobrepasado. No solamente por su formación, sino por su actitud y por sus competencias, esas mal llamadas “habilidades blandas”, que son casi lo más importante cuando trabajas de cara al público y con un equipo de gente, porque también tus compañeros son tus clientes internos.
 
– ¿Cómo valora el programa Cataliza?
– Yo creo que es una buena iniciativa y que debería continuar; a nivel empresarial es importantísimo que existan este tipo de programas, para que también los estudiantes palpen más de cerca lo que es realmente una empresa. Este tipo de prácticas no son las habituales que se hacen con el fin de terminar los estudios y punto, sino que ellos realmente en este periodo, aunque no se queden contratados, pueden conocer directamente nuestro día a día. Es muy diferente a lo que te enseñan o a lo que te dicen que va a ser porque una cosa es la teoría y otra, la práctica. Yo lo valoro favorablemente, tanto para ellos como para nosotros: para que vean cómo es una empresa, cómo relacionarse con otros compañeros, con los clientes, que no siempre es fácil, con proveedores, etc. pero también es muy positivo para la empresa, porque te da la oportunidad de conocer a gente, de formarla y por supuesto de incorporarla, que de eso se trata, de crear empleo. Para nosotros es un valor muy grande, es el deber de toda empresa, crear empleo.
 
 

*Entrevista 1 de la serie “Cataliza desde dentro”